La Organización Mundial de la
Salud OMS recomienda regular como producto del tabaco o medicina a los
cigarrillos electrónicos hasta que existan suficientes estudios e
investigaciones que demuestren su inocuidad.
Los fabricantes comercializan los
cigarrillos electrónicos como una alternativa para dejar de fumar. Sin embargo,
hasta la fecha, no hay suficientes estudios que demuestren su efectividad. Es
frecuente observar que en lugar de dejar de fumar, los consumidores terminan
fumando ambos, perpetuando la adicción, renormalizando el fumar, produciendo un impacto negativo frente
al control del tabaco a nivel poblacional.
Recomienda también controlar la
publicidad, promoción y patrocinio de los cigarrillos electrónicos ya que los
fabricantes están utilizando publicidades atractivas para atraer a los niños y
jóvenes.
Respecto al uso entre jóvenes,
las preocupaciones incluyen el impacto negativo potencial de la nicotina en el
desarrollo del cerebro de los adolescentes, así como el riesgo de la adicción a
la nicotina y el inicio del consumo de cigarrillos convencionales u otros
productos de tabaco.
Asimismo, un estudio reciente de los Centros
para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de los Estados Unidos,
mostró que la experimentación y uso reciente de cigarrillos electrónicos se
duplicaron entre los estudiantes de secundaria y preparatoria del 2011 al 2012. Ello resulta en un estimado de
1.78 millones de estudiantes que han usado alguna vez cigarrillos electrónicos
a partir de 2012.
Una complicación importante de
los cigarrillos electrónicos es la posibilidad de una posible ingesta de la
nicotina líquida que viene en los cartuchos de los cigarrillos electrónicos,
esto podría tener consecuencias mortales.
La salud de todos está en juego,
el legislar este producto hará que se controle la calidad de lo que consumen
los peruanos.
Contacto:
Enlace de comunicaciones
Zory Ghiglino
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